Los mejores 5 consejos para mantener los sistemas de aire comprimido este verano
Posted on julio 12th, 2021
El verano puede causar estragos en su sistema de aire comprimido si no se aplican las medidas de prevención que lo protejan del incremento de las temperaturas. El aumento del calor y de la humedad en un día caluroso, combinado con el rápido enfriamiento del sistema por la noche, creará un exceso de humedad y una mayor carga de agua, algo que, posteriormente, causará una tensión en el rendimiento de sus sistemas.
Siga estos 5 consejos para preparar sus sistemas de aire comprimido para el verano y evite costosos tiempos de inactividad:
1) Instale el filtrado y secado correcto para su aire.
Un buen sistema de filtrado y secado es fundamental para la eficiencia del compresor durante todo el año, pero es especialmente importante durante los meses de verano. Las temperaturas cálidas durante el día y las más frescas por la noche provocan la condensación de la humedad en las tuberías del aire comprimido. Esta humedad puede generar efectos muy dañinos en el equipo posterior o en la calidad del producto.
La primera línea de defensa a la hora de eliminar el exceso de humedad es un separador de agua, que puede eliminar hasta un 99 % del agua acumulada.
También deben instalarse filtros coalescentes, ya que eliminarán partículas y aerosoles de aceite finos, y acondicionarán el aire hasta un nivel adecuado para el secador del aire comprimido.
Finalmente, los secadores desecantes eliminarán cualquier vapor de agua residual, garantizando que el aire esté completamente seco.
2) Limpie los filtros de aire y aceite.
Conservar los filtros mediante la eliminación de la suciedad o polvo y realizar el mantenimiento de sus elementos filtrantes permitirá que el sistema funcione más suavemente y consuma menos energía.
3) Cambie el aceite.
El calor y la humedad afectan a la viscosidad del aceite. Por tanto, cambiar el aceite del compresor antes del verano ayudará a optimizar su capacidad para lubricar el compresor.
4) Inspeccione los drenajes.
El aumento de los niveles de humedad en verano hará que los drenajes tengan que trabajar más para liberar el mayor flujo de condensado. Comprobar todos los drenajes de los depósitos, secadores y filtros contribuirá a asegurar que funcionan correctamente.
5) Compruebe la ventilación.
Asegúrese de ventilar la sala de su compresor y ajuste el flujo de aire de forma adecuada. Un mayor flujo de aire y una buena ventilación ayudarán a mantener las temperaturas bajas y a que el compresor trabaje de forma más eficiente.